Estuardo Zapeta y José Carlos entrevistan al capitán Rodolfo Muñoz Piloña, para conversar sobre la perspectiva histórica del golpe de estado de 1982. El golpe de estado en Guatemala ocurrió el 23 de marzo de 1982, marcando un cambio significativo en la estructura política del país. Fue impulsado por un grupo de oficiales jóvenes del ejército, descontentos con la corrupción y el manejo político de la época. La situación previa al golpe estaba marcada por un conflicto armado interno y un clima de violencia y represión contra la población civil. Entre los principales actores del golpe se encontraban los tenientes Jacinto Carrillo y Victor Hugo Girón Guerra, quienes jugaron un papel crucial en la planificación y ejecución del mismo. El capitán Rodolfo Muñoz, aunque no fue el iniciador, se convirtió en un líder central durante el proceso del golpe. La planificación del golpe se realizó de manera clandestina, con reuniones secretas para evitar filtraciones y garantizar la sorpresa. La ejecución del golpe involucró la toma de varios puntos estratégicos, incluida la captura de la casa presidencial y el control de las fuerzas de seguridad. El general Romeo Lucas García, presidente en ese momento, fue depuesto y posteriormente detenido, marcando el fin de su administración. Las elecciones de 1974, que muchos consideraron fraudulentas, fueron un factor que motivó el levantamiento militar, ya que Ríos Montt había sido un candidato popular en esas elecciones.