María Dolores Arias, Erick Bolaños y Juan Pablo Álvarez abordaron un nuevo caso de corrupción en el Hospital General San Juan de Dios, donde se detectó el desvío de más de 20 millones de quetzales en obras no ejecutadas y servicios sobrevalorados.

La Dra. Erika Pérez, directora del hospital, explicó que se identificaron irregularidades en contratos, arrendamientos de equipo y servicios no prestados, lo cual ha generado una deuda significativa. A pesar de presentar más de 16 denuncias, muchas han sido rechazadas, evidenciando la resistencia institucional para combatir la corrupción, especialmente por parte de sindicatos que obstaculizan despidos administrativos.

Se enfatizó que el 72% del presupuesto del hospital se destina a salarios, dejando pocos recursos para infraestructura y servicios básicos como electricidad y agua. Aunque la Contraloría General realiza auditorías, el presupuesto sigue siendo insuficiente: solo 2 millones están asignados para mantenimiento. Se criticó la falta de acción del Ministerio Público ante casos graves, contrastando con su respuesta rápida ante denuncias menores.

Además, se abordó la necesidad de reformas estructurales, disciplina administrativa y una asignación presupuestaria más eficiente. Finalmente, se destacó que, pese a los desafíos, el hospital ha logrado avances en salud pública gracias a la implementación de tecnología y nuevos especialistas, invitando a la ciudadanía a observar los cambios positivos en lugar de centrarse únicamente en los escándalos.